Todos tenemos un Poder Manifestador, pero si no estamos en sintonía con el, todo lo que manifestemos será caótico.
Muchas veces escuchamos y decimos que debemos activar nuestro poder de manifestación si queremos conseguir la vida de nuestros sueños, pero lo que no te dicen es que ese poder ya está activo, pero no te está funcionando, o al menos no como quisieras.
La Felicidad no cuesta trabajo, sólo requiere compromiso.
Y lo mismo pasa con la manifestación de esa Felicidad, que es sinónimo de prosperidad, disfrute, relaciones nutritivas, placer, gestión emocional, etc.
Si queremos conseguir resultados, debemos poner de nuestra parte, asumir nuestra responsabilidad de todo lo que estamos creando.
Por eso, si no estas dispuesta a comprometerte durante 21 días a direccionar tu Poder Manifestador, es mejor que no te registres.